“Un error se comprende, dos nos empiezan a preocupar, tres nos hacen sospechar”, aseveró Daniel Ripa este lunes, tras la reunión que ha celebrado la ponencia encargada de elaborar el dictamen acerca de la reforma de la Ley Electoral, cuya negociación se retrasa un mes.
Tras ver cómo del texto se eliminaban el voto electrónico, el régimen de incompatibilidades, las sustituciones, la elección de los candidatos por primarias, las listas abiertas y desbloqueadas, los debates o el mailing conjunto, el diputado advirtió de que asistimos a “una nueva chapuza” en lo referente al reparto de escaños, ya que “el equipo jurídico de la Cámara ha sugerido a los proponentes -PSOE- que lo que se planteaba como una propuesta para mejorar la proporcionalidad, es inaplicable en la práctica y presenta profundos defectos formales y jurídicos”.
En ese sentido, Ripa manifestó sus dudas acerca de “si el Partido Socialista se quiere bajar de la reforma de la Ley Electoral, como ya ocurrió la pasada legislatura con la Ley de Transparencia”, además de tildar al partido gobernante de “ineficiente, incapaz de elaborar buenos textos jurídicos y de gobernar adecuadamente”.
Ripa ha lamentado que esta ley se parezca “más un esperpento que a la intención simbólica inicial de llevar a cabo una reforma que podría ser interesante a nivel estatal”.