Pide que la dirección de RTPA no se renueve con criterios partidistas y lamenta el escaso compromiso de la FSA con la regeneración democrática

Daniel Ripa ironizó esta mañana al señalar que «nos fue imposible localizar al ex consejero Francisco Blanco, el único cargo político que no apareció en la comisión de investigación de UGT y que, desde nuestro punto de vista, tenía responsabilidades por no haber actuado para investigar este asunto cuando llegó a la Consejería. Parece ser que Adrián Barbón lo ha encontrado para encabezar la lista al Senado del PSOE asturiano». El diputado y secretario general de Podemos Asturies volvió a denunciar públicamente que en la comisión parlamentaria sobre los fondos de formación, que fue cerrada sin llegarse a debatir ni a votar el dictamen final, «hubo un pacto de silencio entre los partidos, especialmente entre Ciudadanos y la FSA, anticipando lo que viene».

El parlamentario presentó en rueda de prensa una proposición de reforma de la Ley de Reestructuración del Sector Público Autonómico, que regula el funcionamiento de la radiotelevisión pública asturiana. Explicó que, «ante el abandono de Antonio Virgili como director general de RTPA planteamos, como venimos diciendo desde el principio, que los órganos de la radiotelevisión asturiana no pueden regularse por intereses partidistas, sino que tiene que buscarse a los mejores profesionales. Eso pasa necesariamente por un concurso público para la designación y nombramiento de la persona que dirija, es la única forma en que se garantiza la objetividad, profesionalidad e independencia de los partidos políticos».

La formación morada plantea, en concreto, modificar «el artículo que tiene que ver con la designación del director o directora general y también el mecanismo de designación de los miembros del consejo de administración, cuya siguiente elección tiene que ser por concurso público». También se pide «la supresión de las dietas por asistencia al consejo de administración, cercanas a 800 euros, hasta que se elabore el mandato marco, que sigue sin ponerse en marcha y que debe regular, por ejemplo, el apoyo al tejido audiovisual asturiano. Creemos que la supresión de dietas es un incentivo para la elaboración exprés de ese mandato marco».

Apuntó, en previsión de que el Grupo Socialista decida no apoyar la reforma de la ley, que «el modelo que presentamos para RTPA es el que el PSOE de Pedro Sánchez presentó en Madrid para la reforma de RTVE». Y aclaró que «estamos dispuestos a negociar cualquier interinidad de director o directora de RTPA siempre que antes de que acabe la legislatura esté en marcha el concurso público para asignar la plaza. Eso requiere que esta ley se apruebe en lectura pública y con tramitación urgente, y que a partir de ahí los partidos hablemos de cómo dejamos de influir en RTPA».

Más allá del caso concreto de la radiotelevisión asturiana, Daniel Ripa denunció que «el modelo general de designación de órganos de control sea por conchabes entre partidos. No lo vimos para la elección en su momento de Virgili, que fue por un pacto PSOE-PP-IU, no lo vemos para el Consejo Consultivo ni para la Sindicatura de Cuentas». Lamentó que «en su discurso de investidura Javier Fernández hizo énfasis en su apuesta por la regeneración democrática y lo que hemos visto es que se mantenía el enchufismo, se miraba para otro lado con la corrupción y se colocaba a todo el que se podía en cargos de libre designación».

Recordó que entre los objetivos de investidura de Fernández «teníamos prometida una reforma de la Ley Electoral, y el consejero de Presidencia dijo hace dos semanas que no va a salir adelante esta legislatura a pesar del acuerdo político; una Ley de Transparencia y Buen Gobierno que impulsara una Oficina Anticorrupción, y sigue sin ponerse en marcha; y una Ley de Participación y Consultas y Referendos Ciudadanos, que no sólo no salió sino que el Grupo Socialista votó en contra en dos ocasiones de una reforma de Podemos Asturies para facilitar la Iniciativa Legislativa Popular».

A eso, dijo, hay que añadir que «la limitación de mandatos del presidente no se puso en marcha, la modificación de la designación de senadores tampoco. Se hablaba de una comisión de investigación sobre las obras de El Musel que no se puso en marcha o de la reducción de enchufismo y puestos a dedo, y se hizo todo lo contrario». Apeló al actual secretario general de la FSA, ya que «esos son también compromisos no asumidos por Adrián Barbón, porque todas estas cuestiones se han debatido en la última parte de la legislatura, con resultados negativos».